Festival de Viña

Todavía me acuerdo de esos eternos veranos que pasaba en Marbella con mi abuela donde mi máxima entretención era ver de principio a fin el famoso Festival de Viña. Que manera de alucinar con todos los cantantes increíbles que solían venir, donde el clásico e incambiable animador (eso pensaba yo) hacían del festival una tradición que unía a la mayoría de las familia chilenas frente al televisor por una semana hastas horas de la madrugada.

A diferencia de la mayoría de la gente, yo hasta el día de hoy lo que más me gozaba, o lo únique que me gozo hoy en día del Festival, son las competencias Internacionales y las Folclóricas. Lo paso chancho dándomelas de jurado y apostando por quien gana la Gaviota, o simplemente criticando los diferentes tipo de seres que se paran en el escenario, porque digámoslo, en la Quinta se ve de todo.

Como olvidar el clásico de la televisión chilena, el "Maestro" Horacio Saavedra, quien siempre a lucido igual, los años no pasan sobre él, y sobre su música tampoco al parecer, porque desde que tengo memoria que no han cabiado ni siquiera los matices de los "corales" Festivaleros viñamarinos, pero bueno, se mantiene una tradición, creo.

No puedo mentir, no todo es malo , igual sigo gozando con los "artitas" (como se hacen llamar) de taquilla que llegan cada verano. Aquellas situaciones donde jóvenes y no tan jóvenes mujeres lloran por ver a un lolo cantando canciones de amor, gritan hasta quedar sin cuerdas y son capaces de todo por tocarlos. Esa locura me entretiene mil, que onda el efecto que causa en la gente.

No está demás decir de que manera sufro cada vez que pifean a los novatos humoristas o a grupos que no tienen el máximo feeling con el famoso mounstro. O lo divertido de ver a tantos grupos recibiendo la antorcha o gaviota sin tener la menor idea de que se trata susodicho trofeo por el cual el público gritó, divertido. En todo caso, hoy en día es como obvio que todos se llevan antorcha, y el que no se llevó gaviota, la dura que pucha que le fue mal. Me acuerdo que mi abuela me contaba que antes eran escasas la gaviotas que llegaban a manos de los cantantes y que el público exigía un show producido, pero bueno, cambia , todo cambia.

En todo caso , nos queda pa rato seguir disfrutando o criticando, porque Viña tiene Festival !!!!!